Sega iba a por todas, su Mega Drive iba bien encaminada y no iba a permitir que las exclusivas con las que Nintendo estaba alimentando su nuevo “retoño”, Super Nintendo, eclipsaran esta buena marcha. Así, lo que no podían conseguir a base de talonario lo ponían en manos de sus talentosos estudios con el fin de nutrir el catálogo de su negra consola de juegos de todos los géneros y para todos los gustos. Hay que decir que lo consiguió… Vaya que si lo consiguió.
Mega Drive cuenta con uno de los mejores y más variados catálogos de la historia, en el cual destaca con luz propia una saga que nació con el fin no solo de rellenar un vacío en un género, si no de destacar en él, de convertirse en una referencia, como no, estamos hablando de Streets of Rage.
Hace un tiempo comentábamos en este blog el Street Fighter 2 y sus diversas versiones para 16 bits, y es que en aquella época los salones recreativos estaban plagados de joyas que todos los aficionados deseábamos jugar en nuestras casas, el género “beat em up” hoy en día moribundo (pese a que su variante “Hack and Slash” goza de buena salud) era uno de los que más usuarios amontonaba en sus recreativas, títulos míticos como Double Dragon habían sido conversionados para todas las consolas , pero había uno que llamaba poderosamente la atención, llamado en un principio Street Fighter 89, más tarde se lanzó al mercado como Final Fight y marco un punto de inflexión en lo que se refiere al rumbo que tomaría el género, unos gráficos espectaculares y una jugabilidad brutal basada sobre todo en un genial cooperativo eras sus mayores bazas.
|
|
|
La potencia de los 16 bits parecía la adecuada para traer a nuestros hogares esas recreativas que parecían a años luz de lo visto pocos años antes, en Nintendo, como era habitual fueron espabilados y consiguieron una “exclusiva” que ayudo a centrar las miradas en su nueva consola. Final Fight fue golpe de efecto por parte de Nintendo y aunque con una conversión un tanto descafeinada (le faltaba un personaje, no tenía opción de dos jugadores además de faltarle también algún que otro nivel), llamó a muchos jugadores a la consola de Nintendo, una exclusiva temporal ya que el titulo fue lanzado luego para otros sistemas e incluso Sega un tiempo después consiguió la licencia y lanzó una versión de este título para Mega CD que era muy fiel a la recreativa, respetando todo lo que había hecho grande al juego.
|
|
|
Pero mientras, ante esa acuciante necesidad de competir con Nintendo, de tener un título rompedor para su Mega Drive que aunque ya surtida de juegos como Golden Axe, necesitaba un clon de Final Fight, un yo contra el barrio al uso, en el que sustituir las espadas por nuestros puños, los bosques por las calles de la ciudad, y guerreros enemigos por punkis (colectivo al que siempre les cayó la desgracia de ser los enemigos en este tipo de juegos) y todo tipo de pandilleros y malhechores en general puso en marcha un nuevo proyecto en las oficinas de Sega.
Para ello la compañía nipona encargo a uno de sus estudios internos AM7 el desarrollo de un título que reuniera esas características, además decidió sacarlo directamente en consola sin pasar por las recreativas, mercado que dominaba como pocas. El juego vio la luz bajo el nombre de Bare Knuckle en Japón, conocido como Streets of Rage en occidente, comenzando así una de las mejores sagas de “beat em up” que se ha conocido, y que tuvo su máxima expresión con el lanzamiento de la segunda parte que analizaremos en la entrada de hoy.
Publicado por: Sega
Desarrollado por: AM7
Sistema: Mega Drive
Otras versiones: Master System, Game Gear, Descarga digital y recopilatorios
Género: Beat em up
Año:1992
El primer Streets of Rage no destacaba precisamente por su apartado gráfico, cumplidor, sin grandes alardes, con unos “sprites” pequeños para lo que ofrecía su rival, basaba todas sus bazas en su exquisita jugabilidad, pero sobre todo lo que realmente destacaba era su excelente modo para dos jugadores en cooperativo, la variedad de movimientos de sus personajes y en definitiva todo su apartado jugable que lo situaban entre los mejores de su género, sus tres personajes bien diferenciados entre si invitaban a jugar una y otra vez hasta dominarlos por completo, su triunfo también se vio ayudado gracias a que Sega no era partidaria de censurar sus títulos y así detalles sin importancia que otras para otras compañías eran censurables, sobre todo en EEUU, no lo estaban en muchos títulos de Mega Drive lo cual el usuario agradecía.
La buena acogida de la primera entrega espoleó a Sega para continuar con la saga, Streets of Rage 2 (Bare Knuckle 2 en Japón) salió tan solo un año después y supuso un gigantesco salto de calidad técnica respecto a su predecesor, y además lo hizo sin perder un ápice de todo lo que había hecho grande a la primera entrega, todo lo contrario, lo mejoró y lo aumentó para darnos a los aficionados unos de los mejores “brawler” que se haya hecho nunca.
Un argumento sencillo como suele pasar con estos títulos, daba paso a un juego estrella en los lanzamientos de ese año para Mega Drive. Mr X el villano de la primera parte volvía a la carga, raptando a uno de los personajes originales, Adam, con el fin de llamar la atención de los demás y lograr terminar con ellos.
Am7 nos sorprendió a todos en el apartado gráfico, “sprites” enormes, con una animación que ya quisieran muchos juegos de la época, escenarios muy extensos y sumamente detallados con varias zonas diferentes en ellos, además incorporaban una de las grandes especialidades de Mega Drive, el manejo de varios planos de “scroll” de manera simultánea algunos incluso al frente de la pantalla dando una magistral lección de cómo crear sensación de profundidad, además la paleta de colores era increíblemente buena pese a las limitaciones técnicas de Mega Drive en este sentido. Ahora incluso podíamos ver la barra de vida de los enemigos, cosa que se echaba en falta en la primera entrega y que era algo común en los juegos del género contemporáneos.
En cuanto al apartado jugable, podemos ver que el plantel de luchadores se ha aumentado en uno, desaparece como bien nos dice el argumento, Adam, y se mantienen Axel y Blaze de la primera entrega a los que se les añaden dos personajes totalmente diferenciados, por una parte el ágil hermano de Adam conocido como Skate y por la otra Max, una mole de luchador, lento pero totalmente letal en las distancias cortas. Por lo tanto tenemos dos luchadores muy equilibrados como son los veteranos Axel y Blaze y dos luchadores opuestos, uno lento pero poderoso como es Adam y otro rápido pero de golpes poco potentes como es Skate. Esta diferenciación entre los personajes seleccionables condiciona la forma de jugar por lo que beneficia en gran manera la rejugabilidad del juego.
El repertorio de golpes y llaves de los personajes se vio aumentado de manera considerable, por una parte estaban los movimientos básicos típicos de este tipo de juegos, puñetazo, salto y combinación de estos. Si nos acercamos a nuestros enemigos podemos cogerlos, y aquí está un punto que es bastante marca de la casa de esta saga, podemos presionar el botón de acción o saltar por encima del enemigo para ponernos a su espalda, así nuestro personaje puede realizar varios movimientos de presa con los enemigos ya sean de estamparlos contra el suelo o lanzarlos contra otro grupo de enemigos que esperan al acecho, incluso podemos coger a nuestro compañero y lanzarlo contra los enemigos. Los personajes además cuentan con movimientos para golpear a los enemigos cuando nos ataquen por la retaguardia, siendo de gran utilidad ya que muchos enemigos tratan de buscar nuestra espalda mientras golpeamos a otro de sus amigos.
En la primera entrega teníamos un ataque especial limitado, que consistía en llamar a un coche de policía del que disparaban un proyectil que eliminaba a todos los enemigos de la pantalla, en esta segunda parte cada personaje tenía sus propios ataques especiales, estos como típicamente pasa en estos juegos se ejecutan al presionar el botón habilitado para la función, este tipo de ataque es poderoso pero nos restara un poco de nuestra barra de vida por lo que no es muy conveniente su uso a no ser claro que no nos quede otro remedio. Por otra parte los personajes pueden hacer otro tipo de ataques “especiales” que consistían en hacer la típica combinación de: botón del pad dos veces hacia una dirección y el botón de ataque. Así nuestros personajes harán un ataque realmente efectivo, sobre todo en el caso de Axel que restaba gran cantidad de vida a los enemigos y no tocaba para nada la nuestra. Dominar este ataque es fundamental para llegar lejos en el juego. El presionar dos veces el pad a una dirección conlleva en gran parte de los juegos del género que los personajes corran, aquí el único que es capaz de correr es personaje de Skate que subido sobre sus patines esprintará en esa dirección, útil sobre todo para salir de zonas en las que nos veamos rodeados de enemigos.
Y que sería un juego de este tipo sin el clásico repertorio de armas compuesto por cuchillos, espadas, las míticas tuberías y varias armas más, destacar en este apartado que las armas de fuego no aparecen en esta saga, lo cual no se echa de menos. Incluso la presencia de las armas disponibles no deja de ser un añadido más del que podemos prescindir ya que Streets of Rage basa sobre todo su jugabilidad en la lucha cuerpo a cuerpo y el uso de estas armas no es que aporte grandes ventajas, un servidor por ejemplo prefiere luchar sin ellas.
Destacar en este punto el diferente uso que se hace según el personaje de las armas, así por ejemplo Blaze puede asestar dos golpes seguidos con el cuchillo, o al golpear con la tubería en el caso de Max golpeara también a los enemigos que nos acechen por la espalda. Queramos o no usarlas, ahí están, y los enemigos también las portan, por lo que es conveniente desarmarlos si no queremos que nos fastidien más de lo que normalmente suelen hacerlo ya que por ejemplo un cuchillo puede hacer de un enemigo débil un hueso duro de roer.
Además de dichas armas y como buen “beat em up” que se precie, tendremos otros objetos que nos proporcionaran ayudas y ventajas, los obtendremos como es habitual y por norma general rompiendo el mobiliario que encontramos por los escenarios. Regeneradores de salud parcial y completa, aquí representados por una manzana y el típico pollo asado. Bonificaciones de puntos que pueden ser la clásica bolsa de monedas o lingotes de oro, de mucha utilidad para conseguir vidas por puntos, vidas que todo sea dicho aparecerán en varios escenarios, aunque en su mayor parte ni las veremos, tenemos que colocarnos en el sitio adecuado y presionar el botón de acción para obtenerlas.
En los juegos de la época limitados por la cantidad de memoria disponible los enemigos no solían ser muy variados, creando variedad nada más por cambio de color de los ropajes y el nombre de los mismos, siendo más duros de roer unos que otros, Streets of Rage 2 sigue esa tónica, pero nos regala una variedad algo más elevada, así a pesar de luchar contra legiones de clones de enemigos básicos tenemos también moteros, mujeres de mala vida equipadas con látigos, luchadores expertos en artes marciales, peligrosos robots, y una variedad de enemigos bastante elevada para lo que solía ser habitual lo cual es un logro para un cartucho de 16 megas y de los que gran parte deben estar ocupados por la gran variedad de escenarios.
Son ocho los niveles los que se interponen entre nosotros y nuestro enemigo Mr X, todos ellos divididos en zonas y con gran variedad entre ellos, por ejemplo en el primer nivel recorreremos las típicas calles nocturnas de la ciudad, nos adentraremos en un bar para por ultimo terminar peleando en un callejón contra el enemigo de final de nivel. Algunos aparecerán reciclados de la primera entrega pero con una lavado de cara que hará que parezcan nuevos como por ejemplo el puente en construcción, también visitaremos playas, un barco, un parque de atracciones, un estadio de béisbol, y como no la típica factoría de los niveles finales, y por supuesto algo que no puede faltar en todo buen “brawler”, el ascensor de camino a la guarida del jefe final con la lucha contra todos los enemigos finales eliminados anteriormente. Vamos un “beat em up “como tiene que ser.
SoR2 es altamente rejugable, pero si algún día nos cansamos de dar mamporros por las calles, cuenta con un modo “Duel” como ya se había implementado en los Golden Axe domésticos, en el que podemos batirnos en duelo un poco al estilo de los juegos de lucha VS, podemos incluso elegir la arena del combate, basadas en los escenarios del juego y luchar con armas y todo. No es que sea un gran añadido pero es algo que se agradece para pasar un rato con los amigos una vez tengamos machacado el modo historia.
La dificultad del juego no es demasiado elevada y su curva de dificultad está realmente bien ajustada, en los primeros niveles acumularemos cantidades importantes de vidas, ya sea encontrándolas escondidas por los escenarios o por las obtenemos al aumentar nuestra puntuación, vidas que luego veremos cómo van disminuyendo en los niveles finales de dificultada progresiva y más retantes que los iniciales. Aun así el juego no resulta frustrante en ningún momento. Y terminarlo con todos los personajes será algo que realizaras una y otra vez.
En la primera entrega al llegar al enemigo final, este nos hacia una serie de preguntas que alterarían el final del juego, incluso podíamos traicionar a nuestro compañero y aliarnos con Mr X. En esta segunda parte no tenemos opción ninguna, eso sí antes de enfrentarnos al maligno Mr X tendremos que enfrentarnos a un nuevo personaje, Shiva, que se convirtió en uno de los enemigos favoritos de todos los fans de la saga lo que llevo a que en la tercera entrega contara con más protagonismo.
En el apartado sonoro tenemos que la banda sonora sigue siendo a cargo del enorme Yuzo Koshiro, y como siempre con unas composiciones tremendas y que han quedado para siempre en la cabeza de los aficionados, en esta ocasión sí que se pierde algo de la variedad del primer juego y con gran parte de las composiciones tendiendo más a la música electrónica, yo personalmente me quedo más con la banda sonora de la primera entrega aunque sin duda la de SoR2 sigue siendo sobresaliente y muy recordada por todos los aficionados. Es toda una delicia quedarse escuchando esta banda sonora, un servidor cada vez que la escucha traslada su mente a esa niñez frente al televisor “crt” junto con sus amigos.
El en cuanto al tema de los efectos sonoros queda bastante por detrás de la música, y es que como suele pasar con la mayor parte de los juegos de Mega Drive, el sonido es bastante enlatado, bastante malo en comparación con las consolas contemporáneas, aun así podemos escuchar todo un repertorio de gritos y golpes que cumplen a la perfección con su cometido.
Debido al éxito, Sega no dudo en convertir el juego para sus sistemas menores, así al igual que con la primera parte, Streets of Rage 2 vio la luz en las 8 bits ya algo de capa caída por la época, con unas conversiones obviamente recortadas pero muy meritorias. La versión de la 8 bits de sobremesa Master System, ofrecía un apartado técnico bastante decente, pero jugablemente era algo incontrolable, los enemigos y la acción en general eran excesivamente rápidos, y el control de los personajes no se adaptó decentemente en esta versión y era bastante duro, lo cual repercutía negativamente en la jugabilidad, además el modo de dos jugadores cooperativo fue eliminado. Por otra parte debido a las limitaciones de memoria del cartucho se le recortó un personaje seleccionable, así Max dejo de estar disponible, el desarrollo de las fases se veía modificado en ciertos puntos, aunque nos obsequiaron con un nuevo nivel jugable en el que terminábamos luchando a bordo de un tren en marcha.
La versión de Game Gear sufrió aún más los recortes gráficos, en gran medida para adaptarlo a la pantalla de la portátil, por el contrario su jugabilidad está más conseguida y los enemigos se mueven a una velocidad más razonable, lo cual agradecerá el usuario que vea el juego en la diminuta pantalla de la portátil, también cuenta con zonas nuevas en las fases, pero en esta ocasión a parte del recorte de Max, también se han eliminado dos niveles del original, aunque contamos que la fase de la nave alíen del parque de atracciones se ha visto ampliada de manera considerable y cuenta con enemigos exclusivos en la misma.
Dos versiones que hoy en día solo son recomendables por curiosidad, por lo que si queréis jugarlo y no disponéis de original, os recomiendo emular la versión de Mega Drive, o si no tirar de recopilatorios comerciales como puede ser el Sega Mega Drive Collection de X360, PS3 y PC que cuenta con una excelente versión del título.
|
|
|
Su tercera entrega lo tenía todo para ser el Streets of Rage definitivo, pero por diversos factores no llego a alcanzar las cotas de calidad general de esta segunda entrega, además cuenta con una rocambolesca historia de chapuzas de conversiones entre mercados, pese a ello es un excelente juego, de lo mejor de su época y que seguramente comentaremos en el blog.
Una cuarta parte estuvo en preparación para Saturn, Sega intento hacer que el Fighting Force de Core se ambientara en la franquicia y saliera para su consola, pero las negociaciones no llegaron a buen puerto y el juego acabo saliendo bajo el proyecto original para Play Station y N64, quedando por el camino una versión “unreleased” para la consola de Sega. Otra versión de la cuarta entrega, empezó a desarrollarse para Dreamcast, pero fue cancelada en etapas muy tempranas de desarrollo, luego pareció haber intentos de desarrollo de un par de remakes por parte de las desarrolladoras Grin y Ruffian Games pero ninguno llego a buen puerto.
|
|
|
Cabe destacar ya para terminar el remake no oficial a cargo de Bombergames, un grupo de desarrollo amateur que aunando elementos de todos los juegos de la serie, eligiendo lo mejor de cada uno, mejorando los gráficos, para dar luz al Street of Rage definitivo, que si no fuera porque no es oficial podría ser fácilmente considerado como la cuarta parte. Un juego totalmente recomendable si jugáis la saga y os quedáis con ganas de más, que a buen seguro es lo que os pasara.
Streets of Rage Remake de Bombergames |
Como te lo curras!! Poco se puede aportar despues de un trabajo asi.Como opinion personal mi preferido es el streets of rage 2,me parece el mejor de la trilogia y una obra maestra de un genero que cuenta con autenticos bombazos como final fight,double dragon y un larguisimo etc etc
ResponderEliminarFelicidades por el post!! biohazard :)
Muchas gracias Blin! A mi el Streets of Rage 2 no solo me parece el mejor de la saga si no tambien uno de los mejores de su generacion.
EliminarMuy buen análisis, felicidades. Nos vemos por EOL.
ResponderEliminarMuchas gracias!
Eliminar